lunes, 5 de septiembre de 2011

Prótesis de cabeza

La cabeza entera, claro, no se trata de una de esas máscaras de goma que se pone uno al sufrir un percance. La cabeza entera es una prótesis, un simulacro muy tosco, no engaña a nadie, ni siquiera lo pretende. Apenas tiene un par de piezas móviles: la mandíbula, que se abre y cierra aleatoriamente, y los párpados, que son de muñeca, llevan algún tipo de contrapeso interno para que se cierren al estar el sujeto tumbado y se mantengan más o menos abiertos en posición de erguido. Solo este giróscopo rudimentario ocupa todo el interior del falso cráneo, a esta clase de ingeniería grosera me refiero. Palos y cuerdas.

En fin, lo publico pero sin muchas ganas, ya tenía hecho el dibujo cuando he descubierto que cabeza ortopédica es una expresión muy común en Chile, se utiliza para referirse a algo "demasiado caro, que cuesta mucho dinero, de un valor monetario inalcanzable". Vamos, Chile ¡como si fuera un problema de dinero! ¡Estás acudiendo al profesional equivocado, Chile, ese viejo ortopedista sólo sabe hacer pies de madera! ¡NO SABE HACER CABEZAS, NADIE SABE! ¡ENTIERRA ESE CADÁVER DE UNA VEZ!

jueves, 28 de julio de 2011

Exclamación erótica

Ese ¡Ah! es un jadeo sexual: atar cabos le produce un placer muy intenso, aunque fugaz. Pasa los fines de semana resolviendo puzzles, y cada pieza encajada es una pequeña descarga de placer puro y compacto, inigualable. Los lunes llega al trabajo como nuevo.

Yo le entiendo, a mí me pasa algo parecido. La sensación no desmerece para nada la del orgasmo propiamente dicho, sólo que es más sutil, aparece sin avisar y no se localiza en los genitales, sino en el interior del cerebro. En el centro y abajo. La primera vez que me pasó fue viendo a mi abuelo resolver una raíz cuadrada a lápiz y papel. Me pasa sobre todo cuando veo a gente muy concentrada, haciendo operaciones de cabeza, pero también cuando me explican algo. Tiene que ver con el modo en que la información se articula y fluye, no sé por qué algo así me produce placer; pero bueno, tampoco quiero exagerar, en el día a día me limito a hacerme pajas.

viernes, 15 de julio de 2011

Este era el vídeo

Que correspondía a la entrada anterior.



Confío en que todo haya quedado ahora mucho más claro.


miércoles, 13 de julio de 2011

Semen escarchado

El astronauta está muy concentrado en la tarea de reparación. No mandan a un tipo al espacio para que esté rascándose los cojones, cada minuto que está ahí arriba cuesta un dineral: el astronauta lo sabe. Siente que hay miles de millones de ojos fijos en él, nosotros sabemos que ésto no es posible, no hay nadie fijándose directamente en los astronautas; pero ellos tienen el planeta entero a sus pies, mientras trabajan. Es una forma perversa de miedo escénico, entendedlo: pueden ver áfrica y américa al mismo tiempo, y creen que áfrica y américa les devuelven la mirada. Sienten la mirada de millones y millones de ojos hambrientos que les piden cuentas. Por eso el tipo se afana en reparar lo que sea que está reparando ahí arriba, digamos que hay un manguito roto en la estación espacial y él lo está arreglando.

El caso es que es una sensación muy poderosa la de flotar por el espacio. Muy excitante. No es cosa de todos los días, eso de pasearse fuera del planeta. A nuestra generación, criada al calor de la NASA y sus euforias, puede parecernos normal, pero la exploración espacial es en realidad un magnífico alarde, comparable al saltar de un balcón a otro todo borracho, o a hacer caballitos con una moto de gran cilindrada. Los cohetes que mandamos al espacio son las pirámides de hoy día, son las erecciones de esta especie adolescente que acaba de descubrir lo que pasa si se la agarra y menea muy fuerte.

Todo esto pasa por la mente del astronauta. Se le ha nublado ya el juicio, apenas puede prestar atención a la rosca del manguito, tiene la polla tiesa como una estaca, hace bulto incluso a través de las infinitas capas del traje, y no puede pensar más que en correrse en medio del espacio. Toda esa noche negra y gélida, ese vasto campo de muerte estelar, él quisiera irrigarlo, impregnar de vida el universo.

Dando la espalda al planeta, aún con miedo de que puedan verle, ha empezado a tocarse. Ya sabéis cómo, el tipo lleva una aparatosa escafandra, pero es igual que cuando te la agarras vistiendo un pantalón vaquero grueso, hay que apretar fuerte para notar algo, pero el travesaño está claramente ahí.

Empieza a darle igual que áfrica y américa puedan verle. Se está frotando como un loco, visto desde fuera parece más bien una mujer masturbándose, pero haceos cargo del grosor del traje espacial. Traje que por cierto puede abrirse: no mucha gente lo sabe, pero las escafandras de los astronautas tienen cremallera. No una sola, hay varias capas, con botones y velcros también, pero el caso es que puede abrirse. Para entonces lo que él ya no puede es evitarlo: se la saca, y en ese mismísimo supremo instante se corre. Ebrio de satisfacción, intenta torpemente cerrar una a una todas las capas del traje, pero lo cierto es que ya no siente nada entre sus piernas. Un frío seco le ha anestesiado: el mismo vacío del espacio que le ha chupado la polla hasta dejarla azul, el mismo infinito que ha recibido ese impetuoso coágulo de semen enseguida congelado, ese pequeño árbol de hielo que se aleja poco a poco, girando lentamente sobre sí mismo.

viernes, 8 de julio de 2011

Mendigos

La pena de no tener ya una cámara en el ojo, esto dentro de unos años no será un problema, pero todavía no se pueden sacar fotos así, en el momento. En el preciso instante, no vale una milésima de segundo después, ya has seguido caminando.

Éste siempre dice algo si le cruzas la mirada, pero nunca le escuchas porque APESTA.
Éste se había arrinconado contra una puerta de madera muy vieja. Había buscado su sombra natural, una esquina de arrugas y decrepitud, un camuflaje; pensé que podía ser él quien provocara todo el ajamiento, que podría ser el centro de una burbuja que envejeciera varios años todo lo que estuviera en su radio de acción. Pero no, el tipo no era centro de nada, sólo era un mierda arrimado a una puerta.

miércoles, 6 de julio de 2011

Tener nietos directamente

Sara, 26 años, natural de Ciudad Real. Ha insistido en parir sola, sin ayuda. Es muy bruta.

Ese recién nacido que le sale del coño es su nieto, esto se consigue con una técnica experimental, que consiste en gestar dentro del útero dos fetos, gemelos, mellizos o lo que sea, uno chico y el otro chica. En el momento adecuado se provoca la cópula entre ellos, y se fuerza el desarrollo del nuevo feto a costa de los otros.De esta manera, al dar a luz, lo que sale es directamente el nieto. Muy probablemente tendrá algún tipo de tara, pero si quieres tener nietos directamente, si te presentas voluntario para ésto, tú mismo no estás del todo bien de la cabeza.

domingo, 3 de julio de 2011

Lo primero que ví al salir del búnker


Una mujer disfrazada de mantis religiosa, sosteniendo un cubata en la mano.

Es el final de una de tantas historias que se pudren en los cojones de mi mesa. Ahí va el sorbo de esa leche agriada: un tipo se encierra por error en un búnker antinuclear de fabricación casera, creyendo en vano que ha tenido lugar un holocausto nuclear. Al principio todo va bien, tiene álbumes de fotos y cintas VHS de sobra para pasar el rato. Enseguida empieza a aburrirse y palidecer, trata de componer un mensaje de socorro a partir de fragmentos recortados de programas de televisión, pero es inútil. Aparecen las alucinaciones. En un principio las achaca a la radioactividad, pero a la larga descubre que se deben a un hongo que infecta todas sus provisiones de comida. Se resigna a morir de hambre. Luego cambia de opinión y decide salir al exterior, y encuentra todo como estaba. En lugar de un yermo radiactivo plagado de mutantes caníbales, un mundo nuevo al fin y al cabo, encuentra todo como estaba. Sigue el atasco, sigue el calor, nadie se ha ido.

jueves, 30 de junio de 2011

Abogado Thompson


El fiscal compareció con la boca llena de sangre. Venía de cazar un cervatillo.

martes, 28 de junio de 2011

Echar de menos la hierba

Podría decirse que este señor es el representante legal de esa punzada en concreto, es el gerente, el director gerente del departamento de echar de menos la hierba. Toda la empresa es así, está dividida en categorías deprimentes. Desazón organizada. Moho directivo.

lunes, 27 de junio de 2011

Fuegos artificiales de interior


Están ahí, dentro de esa caja de plomo. Es la única forma de detonar fuegos artificiales en un salón de forma segura. La caja no tiene tapa ni abertura de ninguna clase, supongo que encienden la mecha de los cohetes en la propia fábrica, en el momento de forjarla, una mecha muy larga, claro. No es ningún disparate, casi todos los fuegos artificiales se disparan en fechas muy concretas, podría calcularse.

jueves, 23 de junio de 2011

Plana como un espejo


Así es como se ve la superficie de la piscina: plana como un espejo. En el instante del dibujo, la propia saltadora tiene la mirada fija en ese pequeño recuadro que hay varias decenas de metros bajo ella. El borde de la piscina enmarca una imagen nítida y perfecta del cielo sin nubes, da un poco de vértigo extra, porque contradice la referencia natural del suelo, un poco como cuando flotas en el espacio y todo a tu alrededor es cielo nocturno, también a tus pies.

Como habréis imaginado no hay agua en la piscina, sólo un grueso espejo macizo de treinta toneladas y varios metros de grosor. Después de chocar contra él, la propia saltadora acabó igualmente lisa. Reflectaba.

miércoles, 22 de junio de 2011

Enormes cojones

Exacto, son todo escroto. Apenas pueden abarcarse con la mano, pero los testículos propiamente dichos son de tamaño normal. Todo es piel de foca, todo es fibra y grasa y cuero de león marino, prácticamente insensible, pura anestesia. No os riáis, es una gran ventaja evolutiva: su patrimonio genético está perfectamente a salvo, así se arree con un martillo en las pelotas. Ha ganado muchas apuestas gracias a ello, pero esto es lo de menos: lo importante es que cada vez que se aburre se aprieta muy fuerte los cojones y no se hace ningún daño, es como apretar una pelota de gomaespuma. Probad a hacerlo, probad a apretaros los cojones hasta que vuestros nudillos palidezcan: no podréis. Él lo hace cada vez que ve la tele, lo hace sin darse cuenta. Respetad sus enormes cojones.

martes, 21 de junio de 2011

Baburrias asiáticas


La sofisticada, delicada y guapísima perla oriental ejecutiva de pulcros modales escupía las raspas del pescado entre pompas y limos salivares. No los expulsaba violentamente, sólo empujaba con la lengua para sacarlos de la boca, luego resbalaban solos hasta caer en el plato.

En su país se puede.

lunes, 20 de junio de 2011

Ficción aumentada

Perro BatmanNo es tan raro, si Batman es concebible, si tiene sentido conectar hombre y murciélago, no veo por qué no se puede añadir otro eslabón a esa cadena.

Lobezno Simio
No quiero engañaros, en realidad se trata sólo de animales disfrazados. Obra de un bromista, seguramente. Podría ser peor, hay gente que lo hace a propósito, hay gente que se disfraza de superhéroe sin serlo en absoluto.

domingo, 19 de junio de 2011

Hijo mío. Tenemos que hablar.

Hay algo que no te hemos dicho y debes saber.Digamos que el muchacho fue comprado a un bedel ultracatólico que trabajaba de conserje en una clínica abortiva y se dedicaba a recoger los fetos desechados para luego venderlos bajo cuerda a parejas estériles. Le parecía una blasfemia desperdiciar una mercancía potencialmente rentable.

Sí, se los lleva a su casa directamente del contenedor, dentro de la misma bolsa de plástico en la que trae el bocadillo por la mañana, pero a la hora de vender los envuelve un poco mejor. Usa papel de regalo. Ata un lacito en torno al cuello del feto, llevando cuidado de no estrangular a ese ridículamente pequeño bebé hematoma. Dentro del envoltorio sus dedos minúsculos siguen tratando de agarrar el aire y sólo consiguen que el papel cruja, dentro del envoltorio ese rostro hinchado sigue apretando los ojos y boqueando como un pez. Pequeño monstruito mojado, digamos, polluelo ciego.

sábado, 18 de junio de 2011

Repeler botes de humo

Es una lástima que no me haya dado la gana de hacer la animación, porque es un bello movimiento ese del palo golpeando. Y tiene mucho mérito hacerlo bien en medio de todo el jaleo. Brutalidad tranquila, violencia de precisión, como decapitar a un saltamontes con un hacha.
Aquí está usando una raqueta de bádminton, pero el propósito es el mismo. El muchacho se ha echado la revolución a las espaldas, pretende hacerla él solo. Es uno de esos tipos con suerte que siempre sonríen y a los que todo les sale bien. Uno de esos tipos desconcertantes. Su familia tiene mucho dinero, pero no es por eso, sencillamente hace las cosas bien. Y encima el hijoputa es humilde y cae simpático. Yo qué sé, a lo mejor lo consigue.

miércoles, 15 de junio de 2011

Comiéndole el coño al gato

Digo gato y no gata porque no estoy considerando los verdaderos genitales del animal, pienso más bien en un coño humano, un desproporcionado y floreciente filete ahí, en el dibujo, justo bajo la nuca del tipo.

Detrás de la nuca, no en la nuca. Un coño en la nuca es otra cosa, es una imagen asquerosa que dejo sobre la mesa pero no pienso tocar. Una imagen que abre un nuevo mundo de permutaciones copulativas, una variable más en la ecuación de los acoplamientos posibles, no pienso tocarla, ya os lo he dicho, sólo estoy empujándola un poco con el bolígrafo.

Los efectos de la penetración en un cerebro-vagina. Ejercer presión sobre el hipocampo, distorsionar la percepción del espacio tridimensional, revivir momentos pasados como si estuvieran sucediendo en ese mismo instante. Alucinaciones olfativas. Sinestesia.

Embarazos craneales. Migrañas de final incierto.

viernes, 10 de junio de 2011

Camuflado en lo asqueroso

El mejor escondite es aquél que repele las miradas, y en caso de atraerlas, revuelve las tripas y entorpece la razón.Por eso el espía escamoteaba un micrófono oculto en la verruga.

Conspiración muñón

Algo no cuadra en el asunto de los muñones, no puede ser que sean miembros amputados sin más ¿Dónde está la costra? ¿De dónde sale la piel que cubre la sección?
Sin duda rebañan parte de la carne y el hueso raspando con alguna clase de cucharilla afilada, y luego enrollan la piel sobrante como el envoltorio de un caramelo. Si no, no me lo explico.

miércoles, 8 de junio de 2011

Celos

Tras meses de búsqueda, por fin encontró el video porno de su ex.

domingo, 5 de junio de 2011

Un "fuck-you" literal

Utiliza un pene hueco, unos genitales vaciados. Una funda de carne que puede llevarse en el bolsillo.

Vomitó al testificar

Graffiti en la planta pie



Les sucede a algunos sin techo. Duermen descalzos a la intemperie, y los chavales van tan ciegos de sus cosas que confunden ese pie con una pared, es verdad que tanto callo agrietado y sucio de cal engaña. Seguro que el indigente no nota nada mientras se lo hacen, seguro que todavía sigue ahí tirado. Con la tromba que está cayendo, se le tiene que estar borrando con tanta agua, para cuando despierte no va a quedar más que un manchurrón informe. Lo más interesante que le ha pasado en mucho tiempo y se lo va a perder ¡Puta droga!

(esos anuncios de cuando era pequeño, crecer rodeado de anuncios que dicen engánchate a la vida ¿no os pasaba? La intención era buena pero de alguna manera te decían que existía la opción de pasar de la vida. Todos los males de hoy en día tuvieron su origen en esos anuncios, estoy seguro, la culpa es de todos esos monos de plástico imantados para pegar en la nevera. Eran monos, sí, jugaban al doble sentido, en el fondo sabían que era broma)

sábado, 4 de junio de 2011

Hacha bífida

La capa de escarcha que cubre todo esto, la sala de máquinas, tendríais que ver cómo está la sala de máquinas del blog, toda congelada y llena de broza, ramitas y pegotes como de pelo o tela podrida. En fin, lo más adecuado para romper todo este hielo:
El hacha bífida. Joder, no pongáis esa cara, a veces salen así. Son caprichos de la madre naturaleza, pero son como nosotros. Esa hoja pesa como cualquier otro trozo de metal, está suave al tacto, muy mellada pero suave al tacto.

Ahora vivo en una casa nueva. Tuve que dejar mi destartalado hogar, no podía pagarlo. Entonces una amiga de una amiga me dejó su casa, supongo que es tener suerte eso, a veces tengo esa clase de suerte fláccida, suerte de guerrilla. Justo entonces me empezó a entrar algo de dinero, ahora estoy bien, estoy tranquilo, no pasa nada. He dejado el coche y vuelvo a ir en metro, ha sido raro, hay una especie de tele en los vagones, todo el mundo la mira, al principio no lo sabía y pensaba que miraban justo encima de mi cabeza, pensaba que me había salido un arito como de santo y que la gente lo miraba, pero no, era la tele. Todos mirando con la boca abierta, es una sensación muy rara, probad, poneos debajo de la tele del metro y haced lo que queráis. Nadie os verá.

Luego dejé de ir en metro, no tenía ni que salir de casa, había gente que me llamaba y me daba dinero, yo hacía cosas a cambio, cosas de vídeos en el ordenador, falsificaciones, truco y cartón, tiene su gracia, sobre todo si vas muy fumado, he estado fumando mucha hierba todo este tiempo. Hay un vecino que vende hierba, hay gente que me da dinero, todo cuadra. Cuadra tanto que desde que he dejado la hierba no me llama nadie para darme dinero. Pero es igual, la hierba y el dinero sólo sirven para pasar el rato. Lo importante es otra cosa, pero no puedo contarla. Tiene que ver con coños y calamares en su tinta. Comer calamares en un coño, probadlo, de verdad, todo el coño manchado de tinta, y la textura de los calamares, tan parecida a la del coño, a veces se confunde uno al morder. Probadlo, en serio. Nadie os verá.